Ilustres Zulianos: Olimpiades «Pia» Linares Rivas, la voz inmortal del deporte regional


En un día marcado por la nostalgia y el recuerdo, la sección Ilustres Zulianos se viste de gala para rendir homenaje a un verdadero ícono del periodismo deportivo, Olimpiades “Pía” Linares.

Hoy, al conmemorarse 21 años de su partida física, el legado de este gran zuliano resuena en los corazones de quienes crecieron escuchando su voz vibrante en las ondas radiales.

Inicios de «Pia» Linares

Nacido el 1 de octubre de 1924 en la emblemática barriada de El Saladillo, “Pía” Linares fue un hombre que no solo vivió el béisbol, sino que lo respiró y lo convirtió en su razón de ser.

Desde sus primeros pasos en el mundo de la comunicación, se propuso llevar la pasión del deporte a cada hogar zuliano. Su carrera despegó en diciembre de 1953, cuando fundó el programa “Deporte En Marcha”, un espacio que se convirtió en un faro para los amantes del béisbol, iluminando sus vidas durante más de 50 años.

Con una voz que parecía tener el eco de los grandes estadios, “El Pía” se hizo famoso en la radiodifusora “La Voz de la Fe”, donde relataba los entretelones del béisbol aficionado y de las grandes ligas. Su estilo inconfundible lo llevó a ser un referente, un narrador que no solo informaba, sino que emocionaba. Era un maestro de la palabra, capaz de pintar con su voz los momentos más intensos del juego, haciendo que cada oyente se sintiera parte del espectáculo.

En su programa, “Deporte En Marcha”, la magia se desataba. “El Pía” tenía la particularidad de mantenerse al aire sin pausas, como si el tiempo mismo se detuviera para escuchar sus relatos. Las publicidades, que también se transmitían en vivo, eran meras interrupciones a un torrente de emociones que fluía sin cesar. Sus relatos no solo informaban; eran un viaje emocional que llevaba a los oyentes desde la alegría hasta la tristeza, desde la esperanza hasta la desilusión.

Hoy recordamos con cariño algunas de las primicias que “El Pía” compartió con su audiencia: el ascenso de Ramón Monzant al béisbol mayor, un momento que llenó de orgullo a la afición zuliana; la trágica muerte de Roberto Clemente, un luto que se sintió en cada rincón del país; y la contratación de Wilson Álvarez, un hito que prometía grandes expectativas. Sus despedidas, siempre memorables, resonaban en el aire con la calidez de un amigo: “Compañeros fanáticos, hasta aquí nos trajo el tren, muchas noches y muy buenas gracias… por ahí nos encontraremos”.

El 20 de febrero de 2004, la comunidad zuliana se despidió de “Pía” Linares, pero su legado no se extinguió con su partida. En noviembre de 2021, su nombre volvió a brillar al ser exaltado al Salón de la Fama del Béisbol Zuliano, un reconocimiento que llegó como un tributo a su dedicación inquebrantable y a su pasión por el deporte que tanto amaba. Con el 78% de los votos, “El Pía” demostró que su influencia perdura, un testimonio del cariño y respeto que le profesan sus seguidores.

Las anécdotas de su vida son un tesoro que se transmite de generación en generación. Su hermano, Lisimaco Linares Rivas, conocido como “El Fatty”, también dejó huella en el mundo del béisbol, convirtiéndose en uno de los mejores narradores de la región. Juntos, los hermanos Linares marcaron un hito en la historia de la radiodifusión zuliana al transmitir el primer juego de béisbol de grandes ligas para la radio regional en 1963. Esa hazaña fue solo el comienzo de una era dorada para el periodismo deportivo en el Zulia.

Hoy, mientras el sol se oculta tras las montañas zulianas, recordamos a “Pía” Linares no solo como un narrador, sino como un amigo, un compañero de emociones que supo llevar la pasión del béisbol a las ondas radiales. Su legado sigue vivo en cada rincón del Zulia, resonando en los corazones de quienes lo escucharon y aprendieron a amar el deporte a través de su voz. En este homenaje, celebramos no solo su vida, sino también la huella imborrable que dejó en la historia del periodismo deportivo y en la memoria colectiva de un pueblo que nunca olvidará a su querido “Pía”.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *